Esta semana estuvo mi jefe de visita, junto con su jefe (John y Mike). Dos personas muy cordiales pero a quienes conocía mucho más por teléfono que en persona.
Y con esta visita valoré mucho más ese contacto en persona. A pesar de que con John hablo por teléfono muy seguido, no pude conversar con la profundidad con la que lo hicimos esta semana. Pudimos "pingponear" mucho, discutir, encontrar oportunidades y transmitirnos mutuamente confianza de una manera mucho más potente que por teléfono.
Por otro lado, estoy testeando el concepto de Teletrabajo. Cuando no voy a la oficina trabajo, casi exclusivamente, por teléfono. Converso con mi equipo y con gente de Staples de otros países. Y me dí cuenta de que en esas conversaciones -que en general son más frías- también se ven las cosas de distinta manera. Yo, en particular, estoy más analítico por teléfono y puedo escuchar con más atención. Estoy encontrando que es un excelente complemento a las reuniones cara a cara, aunque de ninguna manera puede reemplazarlas. (sí, si vemos que se puede hacer teletrabajo tanto operativa como legalmente, vamos a implementarlo)
Entiendo, entonces, por qué cada tanto vienen de Staples a visitarnos. Y también por qué valoraron mucho que no hayamos hecho cientos de presentaciones, sino que hayamos compartido abiertamente los planes, escuchando sugerencias y mejorándolos en el camino.
En esta visita en particular nos fue MUY bien. El equipo funcionó como un relojito (me gustaría saber de fútbol para hacer una analogía tipo "Independiente del 48" o "Estudiantes del 67", pero seguro meto la pata) y Mike y John se fueron muy satisfechos.
Un poco de distensión:
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